Comentarios (0) 28.10.2017. 13:02
"Las redes de Etxalar han vivido dos espléndidas jornadas de capturas, el lunes y el martes, con lo que ya se superan las 54 docenas en lo que va de temporada y ocupa la segunda plaza de las nueve localidades de Laburdi y Navarra (seis en la Baja Navarra) que conservan este ancestral sistema de caza."
27/10/2017 Noticias de Navarra.| Lander Santamaría | Juan Mari Ondikol
En Etxalar, el lunes capturaron en las redes 21 docenas y tres palomas (por tradición, se cuenta en docenas) y el martes fueron 14 docenas y 4 torcaces, mientras ayer se redujo la migración y únicamente se contabilizaron dos bandadas de las que se cobraron tres palomas.
De las seis redes existentes, las más productivas han sido las llamadas Elutsa y Miarra, las dos que ocupan la parte central del complejo de las seis existentes en el collado de Yarmendi etxalartarra. En las otras cuatro, Fortuna, Lakaina, Kalamua y Monua, se consiguen capturas menores.
También los cazadores de escopeta, los que se sitúan en puestos detrás del sistema de redes y no pueden disparar hasta que estas terminen su trabajo, han conseguido buenas capturas. De hecho, el lunes y martes consiguieron abatir un centenar de palomas con lo que se muestran bastante satisfechos aunque la pasa ha comenzado tarde también este año.
Antes, para la festividad de la Virgen del Pilar y para San Lucas (18 de octubre) ya se había registrado el paso de grandes bandadas, lo que no ocurre en los últimos años. Un antiguo dicho popular señala tres fechas importantes para la migración de las palomas, las de San Lucas (gran caza) por lo que se le conoce como “palomero”, la de Todos los Santos (gran pasa) y la de San Martín, el 11 de noviembre (el fin) cuando ya se consideraba finalizada la temporada.
Ahora, bien por la influencia del cambio climático con temperaturas muy cálidas durante el día en octubre y gran parte de noviembre (el año pasado las terrazas de los bares funcionaron hasta finales de ese mes) el inicio de la migración se retrasa hasta dos semanas. Y otro tanto ocurre con las rutas tradicionales, ya que los últimos años las bandadas se desplazan hacia el oeste y se las ve pasar por localidades costeras del Cantábrico en lugar de hacerlo por los Pirineos.
La localidad de Napal (Donaixti Ibarre) es la que ha capturado hasta ahora más aves, 748 palomas, por las 668 que suma Etxalar. En Lana se contabilizan 508 palomas, 522 en Oskitz (Muskildi) y 263 en Behorleguy, las tres localidades en la Baja Navarra. Por su parte, en Sara, villa de Laburdi vecina y hermana de Etxalar, la temporada está siendo más bien floja, con 111 palomas únicamente. Todos los pueblos con palomeras de redes mantienen una estrecha y amistosa relación y compiten por ser la que más capturas consigue. Al campeón se le concede la txapela en una jornada de hermandad el primer domingo de diciembre.
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